18 de diciembre de 2024 Donar
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Cardenal Cupich pide a católicos recibir la Comunión de pie en Chicago

Foto referencial del momento de la Comunión./ Crédito: Djavan Rodriguez|Shutterstock

El Cardenal Blase Cupich, Arzobispo de Chicago (EE.UU.) instó a los católicos a recibir la Santa Comunión de pie y no hacer gestos que llamen la atención sobre ellos; en una carta publicada esta semana.

En la misiva, publicada en el Chicago Catholic, Cupich dijo que “la norma establecida por la Santa Sede para la Iglesia universal y aprobada por la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos es que los fieles procesionen juntos como expresión de su avance como cuerpo de Cristo y reciban la Sagrada Comunión de pie”.

El cardenal señala además que “no se debe hacer nada para impedir ninguna de estas procesiones” y que “interrumpir este momento solamente disminuye esta poderosa expresión simbólica, por la cual los fieles, al procesionar juntos, expresan su fe en que están llamados a convertirse en el mismo Cuerpo de Cristo que reciben”.

“Ciertamente, la reverencia puede y debe expresarse inclinándose antes de recibir la Sagrada Comunión, pero nadie debe realizar un gesto que llame la atención sobre sí mismo o interrumpa el flujo de la procesión”, añadió. “Eso sería contrario a las normas y la tradición de la Iglesia, que todos los fieles están invitados a respetar y observar”.

La carta no indica explícitamente qué gestos específicos serían aquellos que llaman la atención. CNA –agencia en inglés de EWTN News– se comunicó con la arquidiócesis para solicitar una aclaración al respecto, pero no ha recibido respuesta hasta el momento de la publicación de la nota.

Aunque las directrices emitidas por la Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos (USCCB) establecen que recibir la Comunión de pie es la norma, no se puede negar la Comunión de rodillas.

En la edición de los obispos de Estados Unidos de la instrucción general del Misal Romano, publicada en español, se señala que “la norma establecida para las diócesis de los Estados Unidos de América es que los fieles reciban la Sagrada Comunión de pie, a no ser que alguno de los fieles desee recibir la Comunión de rodillas”.

El asunto también se aborda en el documento del Vaticano de 2004, Redemptionis Sacramentum, de la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos, durante el pontificado del Papa San Juan Pablo II.

El documento del Vaticano, en el numeral 91 establece que “no es lícito negar la sagrada Comunión a un fiel, por ejemplo, sólo por el hecho de querer recibir la Eucaristía arrodillado o de pie”.

En su carta, Cupich escribe que “todos nos hemos beneficiado de la renovación de la Iglesia iniciada por el Concilio Vaticano II”.

“Al reconocer esta relación entre cómo celebramos nuestro culto y lo que creemos, los obispos del concilio dejaron claro que la renovación de la liturgia en la vida de la Iglesia es central para la misión de proclamar el Evangelio”, añadió el cardenal.

En su opinión “sería un error reducir la renovación a una mera actualización de nuestra liturgia para adaptarla a los tiempos en que vivimos, como si fuera una especie de lavado de cara litúrgico. Necesitamos la restauración de la liturgia porque nos da la capacidad de proclamar a Cristo al mundo”.

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“La ley de la oración establece la ley de la fe, es nuestra tradición”, escribió Cupich. “Cuando los obispos asumieron la tarea de restaurar la liturgia hace seis décadas, nos recordaron que este antiguo principio goza de un lugar privilegiado en la tradición de la Iglesia. Debería seguir guiándonos en todas las épocas”.

Durante siglos, antes del Concilio Vaticano II, que concluyó en 1965, la norma en el rito latino era recibir la comunión en la lengua y de rodillas. La Constitución conciliar sobre la Sagrada Liturgia, Sacrosanctum Concilium, promulgada en 1963, no introdujo cambios en esta norma.

Más bien, en respuesta a los obispos que permitían la Comunión en la mano estando de pie, la Sagrada Congregación para el Culto Divino emitió el documento Memoriale Domini en 1969 para permitir la práctica en algunas circunstancias, pero enfatizó que los obispos deben “evitar cualquier riesgo de falta de respeto o de falsas opiniones con respecto a la santísima Eucaristía y evitar cualquier otro efecto nocivo que pueda seguirse” al permitir la Comunión en la mano.

Traducido y adaptado por el equipo de ACI Prensa. Publicado originalmente en CNA.

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