El 8 de marzo marcaba el aniversario de la toma del poder en Siria por el Partido Baath en 1963, pero ahora hay optimismo mientras los cristianos en Siria miran hacia un futuro más brillante.
El domingo, el gobierno sirio cayó, poniendo fin a 50 años de gobierno de la familia Assad después de que los insurgentes, liderados por Hayat Tahrir al-Sham, un grupo rebelde con orígenes en Al Qaeda, ganaron más territorio y entraron en la capital, Damasco.
En una entrevista exclusiva con ACI MENA —agencia en árabe de EWTN News— Mons. Hanna Jallouf, Vicario Apostólico de Alepo y líder de la Iglesia latina en Siria, compartió sus reflexiones sobre lo que acaba de suceder en el país. Admitió que no esperaba que Alepo cayera en manos de la oposición en cuestión de horas ni que el régimen fuera derrocado en tan solo diez días.
Hablando sobre el futuro de los cristianos en Siria, dijo: “Al principio, teníamos miedo porque este escenario era completamente desconocido. Afortunadamente, ha habido garantías de que los cristianos seguirán siendo una parte integral del tejido social de Siria, con compromisos de trabajar en colaboración para reconstruir nuestra nación. Recibimos garantías de que nuestras iglesias y propiedades permanecerían intactas”.
“Espero que todos reciban los derechos que les corresponden. Hemos vivido bajo la opresión y el sufrimiento durante muchos años. Muchas personas murieron, muchas fueron desplazadas o encarceladas. Sin embargo, rezamos por un nuevo amanecer en este país”, dijo Mons. Jallouf el 8 de diciembre.
“No olvidemos que hoy es la fiesta de la Inmaculada Concepción, y por intercesión de la Virgen María, hemos llegado a este momento de alegría. Las campanas de nuestras iglesias repicaron en Alepo y, por primera vez en casi 13 años, volvieron a sonar en Al-Quniya [Idlib]”.