El cardenal electo Dominique Mathieu, Arzobispo de Teherán-Isfahán y la autoridad católica de más alto rango en la República Islámica de Irán, habló sobre la situación de los cristianos en el país, los conflictos regionales en Medio Oriente y de su vida personal.
El franciscano de 61 años estará entre los 21 nuevos cardenales que recibirán sus birretes rojos este sábado 7 de diciembre en la Basílica de San Pedro. El Papa Francisco anunció el consistorio el domingo 6 de octubre, después del rezo del Ángelus.
“Temblé después de la nominación”, recordó Mons. Mathieu a EWTN News. Relató que estaba en un automóvil en Roma cuando oyó el anuncio por la radio. Inicialmente, no entendió completamente la noticia, hasta que el teléfono del fraile que lo acompañaba comenzó a sonar con mensajes de felicitaciones.
“Reaccioné con temblor en ese momento. Soy diabético y empecé a ponerme completamente blanco. Me llevó algún tiempo recuperarme”, añadió el cardenal electo.
“Fue una sorpresa”, reiteró. Añadió que luego se dio cuenta de que podría haber habido “señales del Santo Padre durante algunas visitas que tuve con él”.