Mientras la Catedral de Notre Dame de París se prepara para reabrir el 7 de diciembre, los obispos de Estados Unidos están llamando a las iglesias locales a mostrar su solidaridad con la “hija mayor” de la Iglesia.
Hace cinco años, un incendio devastador estalló en el techo de madera y en la torre de roble de 96 metros de altura de la querida catedral francesa del siglo XII. La restauración de la estructura comenzó con un proceso de limpieza de dos años, seguido de un proyecto de reconstrucción de 760 millones de dólares.
En una publicación en las redes sociales, la Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos (USCCB por sus siglas en inglés) escribió que, mientras la catedral reabre sus puertas, “se invita a las iglesias locales en los Estados Unidos a repicar sus campanas en un gesto de unidad”.
“Este gesto de unir nuestras Iglesias locales con la Catedral de París sería una señal más de nuestra unión con la hija mayor de la Iglesia, cuyos antepasados contribuyeron tanto a la lucha de los Estados Unidos por la independencia”, afirmó en la publicación el presidente de la USCCB, Mons. Timothy Broglio.
La Basílica del Santuario Nacional de la Inmaculada Concepción en Washington DC también está alentando a las iglesias locales a aceptar la invitación de los obispos y hará sonar sus campanas a las 2 p.m. ET el 7 de diciembre, según la USCCB.