MADRID,
Tanto la Conferencia Episcopal Española (CEE) como diversas asociaciones familiares criticaron la aprobación del Consejo de Ministros de un anteproyecto de ley que permite el divorcio en pocos meses, considerándolo un desprecio total hacia el matrimonio y un frontal ataque contra la familia.
En una nota de prensa, la CEE critica que la nueva ley, intenta equivocadamente responder al grave problema del incremento de las rupturas matrimoniales y los dramas consiguientes, porque parte de una incorrecta visión del matrimonio que no considera su carácter sagrado y lo reduce a un mero contrato entre particulares.
Los Obispos manifestaron su preocupación porque “muy probablemente lo que vendrá serán más divorcios y más sufrimiento. Porque la Ley no parte de una buena concepción antropológica del matrimonio como institución social fundamental, sino más bien de una ideología individualista que lo reduce a un mero contrato entre particulares”.
El comunicado citó lo declarado anteriormente por la Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal en la Instrucción Pastoral “La familia, santuario de la vida y esperanza de la sociedad” en la que sostiene que “si se pierde el sentido sagrado del matrimonio, se acabará por valorarlo simplemente como un contrato entre particulares, y, por consiguiente establecido a su arbitrio y dependiente de su voluntad, la cual puede cambiar y llegar a romperlo”:
Así, “el divorcio es concebido como un derecho, incluso como una condición para contraer matrimonio, una cláusula de ruptura. Esta mentalidad introduce una inestabilidad estructural en la vida matrimonial, que la hace incapaz de afrontar las crisis y las dificultades con las que inevitablemente se encontrará”, señalaba en aquella ocasión la CEE.
De otro lado, el Foro Español de la Familia (FEF) consideró la reforma de la Ley del Divorcio "un desprecio total" a la familia y denunció que la medida supone su equiparación con las parejas de hecho.