20 seminaristas del Opus Dei recibieron la ordenación diaconal en Roma, en una Misa presidida por Mons. Hugo Nicolás Barbaro, Obispo de San Roque De Presidencia Roque Sáenz Peña (Argentina). Del grupo cuatro son de Latinoamérica y siete de España.
En la Eucaristía que presidió el 23 de noviembre en la Basílica de San Eugenio en la Ciudad Eterna, el prelado argentino resaltó que el espíritu de servicio caracteriza la vida del diácono y del sacerdote, “porque Jesús no vino a ser servido sino a servir y a dar la propia vida”.
Según señala el sitio web del Opus Dei, el obispo alentó a los diáconos a ayudar al Prelado de la Obra, Mons. Fernando Ocariz, en su servicio pastoral y que grabaran en su alma “las enseñanzas de san Josemaría, que anhelaba ser el servidor de todo el mundo, sin distinción”.
“¿Qué añade entonces el diaconado al servicio de un laico, qué le añade al futuro sacerdocio ministerial? El mismo San Josemaría les responde: el sacerdote debe ser alfombra donde los demás pisen blando; comienza entonces para ustedes un tiempo de entrenarse en esto de ser alfombra”, continuó Mons. Barbaro.
Tras resaltar que servir “quiere decir estar disponible, renunciar a vivir según la propia agenda, estar preparados para las sorpresas de Dios”, el obispo destacó la importancia de “no perder de vista que Dios habla a través de las necesidades de nuestros hermanos, de las de la gente, y con frecuencia no encajan con lo previsto”.
El obispo argentino dijo además en su homilía que para ser “alfombra sobre la que todos pisen blando” es necesario “tener un oído en Dios y otro oído puesto en la gente, como suele decir el Papa”.