La dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo impide a los sacerdotes entrar en los hospitales en Nicaragua para dar la Unción de los Enfermos a quien lo necesite, según denunció la abogada Martha Patricia Molina, autora del informe Nicaragua: ¿Una Iglesia Perseguida?.
Alrededor de 10 sacerdotes de diferentes diócesis le confirmaron la situación a Molina, quien sin embargo precisó —en una entrevista con EWTN Noticias— que a otros pocos sí les permiten entrar en los hospitales, “pero estos son sacerdotes algo afines a la dictadura, ellos a veces si tienen la posibilidad de ingresar a los hospitales, pero no es algo generalizado”, afirmó.
La abogada comentó que antes de este año la dictadura sandinista permitía a los sacerdotes ingresar en los centros de salud. Las medidas de seguridad han arreciado sin ninguna justificación y la persecución se hace más férrea cuando los presbíteros intentan entrar con su distintivo clerical, por lo cual muchos optan por tratar de entrar usando vestimenta secular.
Molina aseguró que el problema es aún más grave en el interior del país, “donde los sacerdotes son más reconocidos porque son pueblos muy pequeños, entonces las autoridades, los médicos que están en los hospitales o las personas que se encuentran cuidando los portones para ingresar a los mismos, ya los conocen y les prohíben la entrada más rápido”.
“En otras partes, por ejemplo en la capital, las personas que están cuidando las entradas de los hospitales no reconocen a todo el clero de la Arquidiócesis de Managua, entonces ahí tienen mayor oportunidad para ingresar, pero no revestidos se sacerdotes, sino que están entrando como laicos para brindar la Unción los Enfermos para las personas que están a punto de fallecer”, añadió.