Como es tradición, el Papa Francisco se trasladará a un cementerio de la ciudad de Roma para presidir la Misa por la Conmemoración de todos los Fieles Difuntos, el próximo sábado 2 de noviembre.
Este año, lo realizará en el cementerio Laurentino de la Ciudad Eterna, donde ya acudió hace seis años, en 2018.
En aquella ocasión, el Santo Padre se detuvo a rezar en el llamado “Jardín de los Ángeles”, un recinto del cementerio reservado para los niños fallecidos y los bebés no nacidos.
Sin pronunciar ningún discurso, el Papa Francisco recorrió las tumbas de los niños, ofreció un ramo de flores y rezó en silencio durante algunos minutos.
El año pasado, sin embargo, el Papa Francisco visitó el Rome War Cementery, en la zona de Testaccio, donde están enterrados los soldados que perdieron la vida en la Segunda Guerra Mundial
Desde allí, el Pontífice se pronunció en contra de la violencia de la guerra que afecta a tantos países en la actualidad, señalando que lo que les ocurrió a esos soldados en el siglo pasado, sigue sucediendo aún hoy.