El Senado de Italia aprobó una ley que tipifica como delito los vientres de alquiler o maternidad subrogada solicitada incluso fuera de Italia, con la posibilidad de que quienes infrinjan la norma se enfrenten a penas de prisión y a una multa de hasta 1 millón de euros.
La gestación subrogada es ilegal en Italia desde 2004, según la Ley 40 que regula la reproducción médicamente asistida.
Con la votación del 16 de octubre, Italia modifica la Ley 40 para ampliar su jurisdicción y penalizar incluso la maternidad subrogada “cometida en el extranjero”, que ahora la legislación italiana considera un “crimen universal”.
El artículo 12, apartado 6 de la Ley 40 establecía hasta ahora que “quien, bajo cualquier forma, realice, organice o publicite la comercialización” de la maternidad subrogada será castigado con hasta dos años de prisión y una multa entre 600.000 y 1 millón de euros.
Según refiere CNA —agencia en inglés de EWTN News— con la modificación aprobada, se precisa ahora que “si los hechos a que se refiere el apartado anterior, referentes a la gestación subrogada, se cometen en el extranjero, el ciudadano italiano será castigado según la ley italiana”.