El Obispo de Zamora, Mons. Fernando Valera, ha recibido la Unción de Enfermos antes de someterse este próximo miércoles a una operación de espalda debido a una estenosis que le tendrá apartado de sus obligaciones pastorales al menos un mes.
Según de detalla en un comunicado hecho público este martes, el efecto inmediato de esta circunstancia ha sido la suspensión de la visita pastoral al arciprestazgo de Aliste-Alba, que agrupa a 84 parroquias de la diócesis zamorana.
“Apenado por tener que posponer lo que es un acontecimiento para las parroquias y para el propio pastor, ha comunicado a sus fieles que desea ofrecer esta situación de vulnerabilidad por todo el pueblo de Dios y la diócesis de Zamora, por la santidad de las vocaciones, por los seminarios diocesanos y por el clero”, explica el texto difundido por la diócesis.
El Obispado recuerda, citando palabras del Papa Francisco, que en la Unción de Enfermos que ha recibido el prelado en la tarde de ayer lunes, “es el mismo Señor el que sufre derramando sobre sus heridas el aceite del consuelo”.
Así, Mons. Valera ha recibido “el acompañamiento espiritual de Cristo en este momento de operación y rehabilitación”, puesto que se trata de “un sacramento lleno de esperanza, que brinda consuelo, sanación y preparación espiritual”.
“La Iglesia, a través de este rito, acompaña a los enfermos, recordándoles que Cristo está presente en su sufrimiento y que la gracia de Dios los fortalece en sus momentos de mayor debilidad” añade la diócesis.