El Papa Francisco ha expresado a través de un telegrama sus condolencias por el fallecimiento el pasado sábado del Arzobispo emérito de Luanda (Angola), el Cardenal Alexandre do Nascimento, el más anciano del mundo, a los 99 años.
Según señala el sitio web Catholic-Hierarchy, especializado en los obispos del mundo, el purpurado era el más longevo del planeta, puesto que ocupa ahora el cardenal argentino Estanislao Karlic.
En el texto remitido al actual arzobispo, Mons. Filomeno do Nascimento Vieira Dias, el Pontífice ha expresado “la comunión de mis oraciones, para que a nadie le falte el consuelo de la resurrección” al conocerse el fallecimiento de quien fuera secretario general de Cáritas Internacional.
El Papa Francisco rememora “los cuidados dispensados por el querido Dom Alexandre a su rebaño en tiempos revueltos y difíciles, habiendo sido para todos expresión del rostro misericordioso de Jesús, el buen samaritano de la humanidad”.
“La fe en cristo y la esperanza en la vida eterna hicieron de él un hombre valiente y libre, capaz de orientar sus pasos en favor del bien común, e incluso colaboró con esta sede apostólica en su celo en favor de los más pobres y necesitados, guiando la dirección de Cáritas Internacional”, reseña el texto del telegrama.
El Papa Francisco, agradecido a Dios “por todo lo que el Señor ha realizado en él y a través de él”, ha suplicado al Creador “que rodee a este fiel siervo suyo con la luz de la misericordia y le abra las puertas de la vida”.