El domingo 22 de septiembre 180.000 motociclistas llegaron al Santuario de la Virgen de Fátima para participar en la 9ª Peregrinación de la Bendición de los Cascos, quienes abarrotaron el recinto mariano en Portugal.
La peregrinación comenzó con una procesión de la imagen de la Virgen de Fátima, llevada en andas por varios motociclistas, junto a la Basílica de la Santísima Trinidad.
“El motociclista, a bordo de su motocicleta, tiene siempre en su horizonte una meta, un objetivo, y poco a poco, de una forma no muy consciente, va vislumbrando que así es la vida, es un camino y un viaje, una peregrinación constante, y que en el horizonte de la existencia no hay un lugar sino una persona”, señaló el Patriarca de Lisboa, Mons. Rui Valério, en declaraciones a los periodistas antes de la peregrinación.
El rector del Santuario de Fátima, P. Carlos Cabecinhas, destacó por su parte el carácter solidario de la peregrinación –convocada bajo el lema“Nos forma y nos guía lo que amamos– y consideró que “es un gran día en Fátima” y “un especial momento para compartir, algo que no es secundario”.
En esta peregrinación, explica el sitio web del Santuario de Fátima, se hizo una colecta para adquirir una prótesis de cadera para un motociclista de 22 años que quedó tetrapléjico tras un accidente en su moto; y se reunió dinero para ayudar a las compañías de bomberos más afectadas en el combate contra los incendios forestales en Portugal.