El Papa Francisco llegó a Luxemburgo a las 10 a.m. (hora local) tras un vuelo de aproximadamente dos horas.
El Santo Padre no saludó a los periodistas del avión como de costumbre. Tras agradecerles por su compañía, dijo: “No me siento con ganas de hacer el recorrido", es decir, caminar en el avión para saludar a cada periodista. "Los saludo desde aquí. Y gracias”, dijo el Pontífice.
El Director de Oficina de la Santa Sede, Matteo Bruni, explicó que el hecho de que el Papa Francisco no haya saludado “no se debe a sus condiciones de salud, sino a que es un vuelo muy corto y no había tiempo”.
Subrayó asimismo que no es la primera vez, ya que también ocurrió en el viaje a Estrasburgo en 2014.