El sábado 21 de septiembre tomó posesión el nuevo Arzobispo de Valencia (Venezuela), Mons. Jesús González de Zárate, actual presidente de la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV). “Acojo en espíritu de fe y agradecimiento el nombramiento que el Papa Francisco ha hecho sobre mi persona”, expresó.
Desde la Catedral de Valencia, sede episcopal, Mons. González afirmó que inicia su ministerio apostólico “con la certeza que el Señor, cuando llama, nunca nos deja solos” sino que, en las limitaciones y pecados, “nos cura y capacita para responder a su llamado”.
El nuevo arzobispo también aseguró que no tiene otro deseo sino el de cumplir entre su feligresía la voluntad de la providencia divina. “Como dice mi lema episcopal, no quiero otra cosa que en todo amar y servir”, indicó.
En ese sentido, Mons. González remarcó en un homilía que asume sobre sí mismo “las alegrías y esperanzas, los sufrimientos y dolores” del pueblo de Dios que peregrina en su nueva jurisdicción eclesial. Además, confió su labor a la intercesión de los prelados que le precedieron en la sede episcopal de Valencia.
El presidente de la CEV explicó que una de las tareas más importantes de los obispos es ser principio y fundamento de unidad para su grey, garantizando la fraternidad mediante un servicio de comunión.
“Por eso los invito desde ahora al diálogo constructivo, a construir puentes, a derribar barreras, a superar distancias, prejuicios y desconfianzas; a reconocernos mutuamente como hermanos y vivir, con radicalidad, el amor al prójimo”, remarcó.