¿Cuáles son las heridas del mundo actual? Esta fue la pregunta planteada al reconocido cineasta católico Juan Manuel Cotelo en una reciente entrevista. Su respuesta se centró en varias causas, siendo la principal la casi nula “capacidad de sufrimiento” del hombre actual.
“Hay un exagerado deseo de bienestar, de placer y de pasarlo bien, donde no hay casi capacidad de sufrimiento. Entonces, se ha asociado el sufrimiento a algo peyorativo, a algo malo, cuando este es siempre el camino para cualquier cosa buena. No hay deportista que consiga una meta sin sufrimiento; no hay un amor que se consiga sin sufrimiento”, aseguró a ACI Prensa durante el Congreso Eucarístico Internacional que se llevó a cabo en Quito (Ecuador), del 8 al 15 de septiembre.
El creador de películas católicas como “La Última Cima”, “Tierra de María” y “El Mayor Regalo” afirmó que, desde el momento en que se nos enseña que el sufrimiento es malo y que debemos evitarlo a toda costa, “ahí comienzan las heridas”. “El sufrimiento no es malo, sino que va unido al amor, y cuando no estás dispuesto a sufrir, en el fondo no estás dispuesto a amar”, sostuvo.
“Sufrir es parte natural de la vida”, recordó Cotelo, y agregó: “Jesucristo dice que quien quiera ser un discípulo, que cargue con su cruz y me siga; que no se asuste ante la cruz, que la cargue, que la lleve, que sufra y me siga. El problema está cuando nos asusta tanto el sufrimiento. Ahí empiezan los traumas”.
Estas heridas emocionales son, según Juan Manuel Cotelo, el resultado de la “pérdida de amor en la familia, la falta de amor en la sociedad, la constante competitividad y el deseo de sobresalir por encima de los demás”.