El Cardenal Marcelo Semeraro, prefecto del Dicasterio para las Causas de los Santos, presidió el sábado 31 de agosto la Misa de beatificación del seminarista Ján Havlík, muerto en 1965 tras años de cárcel y torturas del régimen comunista, en la entonces Checoslovaquia.
Según informa Vatican News, el Cardenal Semeraro presidió la Misa de beatificación de Havlík, en el espacio en frente a la Basílica de los Siete Dolores de la Virgen María en Sastin, Eslovaquia.
En sus palabras luego del Ángelus este domingo en el Vaticano, el Papa Francisco recordó que “este joven fue asesinado en 1965, durante la persecución del régimen contra la Iglesia en la entonces Checoslovaquia. Que su perseverancia en el testimonio de la fe en Cristo sea un aliento para cuantos aún hoy sufren pruebas similares. ¡Un aplauso para el nuevo Beato!”.
Ján Havlík nació el 12 de febrero de 1928 y murió el 27 de diciembre de 1965, tres años después de su liberación, después de haber sufrido 14 años de maltratos y torturas físicas y psicológicas, duros interrogatorios, un largo aislamiento y una condena a trabajos pesados. Al fallecer tenía 37 años.
El Cardenal Semerario dijo en su homilía que “el amor de Cristo es la fuerza que nos hace vencer la debilidad, la energía que nos hace vencer el miedo, la luz que nos hace vencer las tinieblas".
"Fue la virtud de la esperanza la que lo hizo crecer y sostuvo su vocación. Un signo de esperanza, de hecho, es ya la elección de ser discípulo de San Vicente de Paúl", y como él Ján "fue verdaderamente un rayo de sol para quienes lo conocieron".