En el día de la Asunción de la Virgen María, la dictadura de Nicaragua detuvo al sacerdote Danny Roberto García, de la Diócesis de Matagalpa, cuyo obispo es el exiliado Monseñor Rolando Álvarez.
Esta detención se produjo además en la víspera de las bodas de oro sacerdotales del Cardenal Leopoldo Brenes, Arzobispo de Managua, quien fue ordenado el 16 de agosto de 1974.
Según informa el diario nicaragüense Mosaico, la detención ocurrió el 15 de agosto por la noche, luego que la policía asediara las casas curales de las parroquias San Juan Bautista, en el municipio de Muy Muy, de la que es párroco el P. García; y la de San Ramón Nonato, en el municipio de San Ramón.
El P. García estaba atendiendo la segunda parroquia debido al destierro de su párroco, Mons. Ulises René Vega Matamoros, enviado a Roma con otros seis sacerdotes el pasado 7 de agosto.
Tras la detención del P. Danny García su paradero es desconocido.