Tras el destierro de siete sacerdotes; y luego de detener a otros dos presbíteros y dos mujeres laicas, la dictadura de Nicaragua canceló la personalidad jurídica de Cáritas Matagalpa, la diócesis del obispo exiliado Rolando Álvarez, y de 5 iglesias cristianas.
El lunes 12 de agosto, el diario oficial La Gaceta dio a conocer los acuerdos aprobados por Mará Amelia Coronel Kinloch, Ministra del Ministerio del Interior, con los que se cancela en total 15 organizaciones sin fines de lucro: 6 por haber “incumplido sus obligaciones” y “no reportar por periodos de entre 02 y 13 años sus Estados Financieros”; y 9 “por disolución voluntaria”.
En julio de este año, la abogada e investigadora Martha Patricia Molina, autora del informe Nicaragua: ¿Una Iglesia perseguida?, explicó a ACI Prensa que es la misma dictadura, a través del Ministerio del Interior, la que decide no recibir los estados financieros cuando las organizaciones quieren presentarlos, para luego argüir eso como una razón para la cancelación de la personalidad jurídica.
En el primer grupo están la Asociación Cáritas Diocesana de Matagalpa, la Fundación Iglesia el Buen Samaritano, la Asociación Iglesia de Dios Pentecostal Espíritu Santo y Fuego; y la Asociación Ministerio Evangelístico Tiempos de Cambio.
Sobre el destino de las propiedades de estas instituciones, el diario oficial nicaragüense señala que “corresponderá a la Procuraduría General de la República realizar el traspaso de estos a nombre del Estado de Nicaragua”.
En el segundo grupo están la Asociación de Concilios de Iglesia Cristiana “Arca del Evangelio” y la Asociación Ministerio del Reino de Dios.