A bordo de una colorida “trajinera”,una típica embarcación local, la venerada reliquia de San Judas Tadeo, recientemente llevaba a México desde el Vaticano, encabezó una procesión que capturó el espíritu festivo y religioso del lago de Xochimilco, uno de los sitios más emblemáticos de la Ciudad de México.
Por primera vez, un fragmento del hueso del brazo de San Judas Tadeo visita México, ofreciendo a los fieles una oportunidad única para venerar esta sagrada reliquia en diversas localidades del país.
El domingo 11 de agosto, el turno fue para Xochimilco, localidad que alberga el Lago de Xochimilco, patrimonio cultural de la UNESCO, conocido por sus canales y parcelas de tierra construidas sobre el agua que datan de tiempos prehispánicos que permiten un vistazo al pasado sobre cómo era la vida en el desaparecido imperio mexica, también conocido como azteca. Hoy en día, estos canales son un popular destino turístico para paseos en trajineras, las tradicionales embarcaciones adornadas con flores y banderas.
Después de su visita a la Catedral de San Buenaventura en la Diócesis de Cuautitlán, el 10 de agosto, la reliquia comenzó su recorrido el siguiente día en la Diócesis de Xochimilco, que abarca también las alcaldías de Milpa Alta y Tláhuac en la Ciudad de México.