El Vaticano durante el pontificado del Papa Pío XII estuvo a punto de expulsar del sacerdocio al fundador de los Legionarios de Cristo, el P. Marcial Maciel, por acusaciones de abuso sexual en 1956, 50 años antes de que fuera retirado del ministerio activo, según muestran documentos de la época.
El P. Marcial Maciel (1920-2008), quien fundó la congregación religiosa cuando era un joven seminarista en México en 1941, fue investigado a mediados de la década de 1950 por acusaciones de que abusó sexualmente de niños y por un consumo desordenado de morfina, según un artículo publicado el domingo por The Associated Press. Fue destituido temporalmente como líder de los Legionarios, pero más tarde recuperó el control de la congregación poco después de la muerte de Pío XII, en 1958.
En 2006, 50 años después de esa investigación del Vaticano, el Papa Benedicto XVI retiró a Maciel del ministerio activo, basándose en una investigación que la Congregación —hoy Dicasterio— para la Doctrina de la Fe llevó a cabo cuando Benedicto XVI la dirigía, antes de ser elegido como Papa en 2005. El Pontífice invitó al P. Maciel a una vida de oración y penitencia.
Maciel abusó sexualmente de al menos 60 menores, la mayoría de entre 11 y 16 años, según un informe publicado por los Legionarios de Cristo en diciembre de 2019. También mantuvo relaciones sexuales con varias mujeres y engendró varios hijos ilegítimos y vivió en el lujo mientras ordenaba a otros miembros de la congregación vivir una vida de oración, pobreza y mortificación.
Maciel sobrevivió en gran medida gracias a la negación de sus malas acciones y a su capacidad para cultivar amigos en altos cargos de la Iglesia Católica durante su largo tiempo a la cabeza de los Legionarios, entre ellos obispos y cardenales. También tenía la confianza de San Juan Pablo II, fallecido en 2005.
El artículo de AP señala que, en 2012, las víctimas mexicanas de Maciel publicaron en línea 200 documentos filtrados del Vaticano y un libro titulado La Voluntad de no Saber.