Expertos en defensa de la libertad religiosa rechazan el anuncio de una próxima derogación del delito de ofensas a los sentimientos religiosos que el Gobierno de España estaría valorando poner en marcha en el marco de un plan llamado de “regeneración democrática”, presentado este miércoles por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
En las últimas horas, Sumar, plataforma política de ideología comunista, cuyos diputados forman parte del Ejecutivo en coalición con el Partido Socialista Obrero Español (PSOE), ha asegurado que ha alcanzado un acuerdo para la derogación del tipo recogido en el artículo 525 del Código Penal español.
En ese numeral se especifica que “incurrirán en la pena de multa de ocho a doce meses los que, para ofender los sentimientos de los miembros de una confesión religiosa, hagan públicamente, de palabra, por escrito o mediante cualquier tipo de documento, escarnio de sus dogmas, creencias, ritos o ceremonias, o vejen, también públicamente, a quienes los profesan o practican”.
Las mismas penas se aplican a los que hagan públicamente escarnio, de palabra o por escrito, de quienes no profesan religión o creencia alguna.
La Fundación Española de Abogados Cristianos, que ha denunciado en reiteradas ocasiones a diferentes personas e instituciones por la posible comisión de este delito, ha mostrado a través de un comunicado “descontento” con el anuncio.
La entidad de juristas considera que, aunque la medida se tome en el marco de un plan que dice contribuir a la regeneración democrática y a la protección de la libertad de expresión, “se trata de un ataque directo a las libertades de los creyentes”.