Con el propósito de “reavivar la fe de los católicos y la misión”, del 8 al 12 de julio se llevó a cabo en la Diócesis de Oruro (Bolivia), el VIII Congreso Nacional Misionero.
Con el lema “Bolivia, con la fuerza del Espíritu, testigos de Cristo”, el encuentro reunió a más de 500 personas en torno a cuatro ejes: “La comunión camino sinodal”, “Espiritualidad misionera”, “Custodios de la Creación” y “Lenguaje y estilo del ambiente digital”.
Durante los cuatro días del congreso, se desarrollaron ponencias, se escucharon testimonios, y se desarrolló la expo-misionera. También hubo talleres, celebraciones de la Eucaristía y momentos de oración, reflexión y Adoración.
Entre los propósitos del CMN estuvo el de “fortalecer la reflexión misionológica y el compromiso misionero Ad Gentes de la Iglesia, a través del intercambio de experiencias misioneras de las dieciocho jurisdicciones, para responder con eficacia a los desafíos pastorales que conlleva salir al encuentro del otro y el cuidado del medio ambiente como testigos de Cristo hasta los confines de la tierra”, afirmó la Hna. Cintia Vasquez, Secretaria General de Obras Misionales Pontificias en Bolivia, según recoge el sitio web de la Conferencia Episcopal Boliviana.
Mons. Aurelio Pesoa Ribera, Obispo del Vicariato Apostólico del Beni y Presidente de la Conferencia Episcopal Boliviana, consideró que esta instancia es “una oportunidad y sobre todo un instrumento para reavivar la fe de los católicos, para ir un poco más allá, caminando juntos, como hemos vivido este tiempo del Sínodo de la Sinodalidad”.
El Congreso finalizó este viernes con la celebración de la Eucaristía, presidida por el Nuncio Apostólico en Bolivia, Mons. Fermín Emilio Sosa Rodríguez, en el marco de la preparación del Año Jubilar por los 100 años de la Diócesis de Oruro.