En el día en que la Iglesia Católica celebra la fiesta de San Josemaría Escrivá, sacerdote fundador del Opus Dei, recordamos un consejo que dio hace 50 años y que aún sigue vigente, para vencer a la rutina.
El 4 de julio de 1974, en un encuentro con miembros del Opus Dei en Chile, en el marco de una gira de San Josemaría en Latinoamérica, el santo respondió a la pregunta de una mujer casada sobre la rutina y “el trabajo ordinario que parece pesado y que parece no tener brillo”.
“Tú me miras seria. ¡Si no es verdad que tus días sean iguales! Si pones amor en tus días, cada día es distinto”, respondió San Josemaría.
“Tú, de cara a Dios hija mía, con el mismo corazón que amas a tu marido tienes que amar a Dios. Y el amor a tu marido será más grande, y a tus hijos y a tu hogar y a tu gente y a tu patria y a los abajo y a los de arriba y a la humanidad entera, y te sentirás capaz de sacrificar un poquito de tu vida, aunque no te sobre el tiempo, si lo haces todo por amor”, agregó.
“En la vida hay que hacerlo todo por amor”, subrayó San Josemaría.
“El amor tiene alas. Y verás que unas veces vuelas más bajo y otras más alto, y por lo tanto, las perspectivas del día, siendo parecidas unas a otras, son siempre distintas”, aseguró el santo.