El Custodio Franciscano de Tierra Santa, P. Francesco Patton, ofreció una reflexión sobre el profundo significado espiritual del tradicional “pan de San Antonio”, que se bendice y se reparte en distintos lugares del mundo, como la Basílica de San Antonio en Padua (Italia) el 13 de junio, día de la fiesta del llamado “santo del mundo”.
En su homilía este 12 de junio, publicada en el sitio web de la Custodia Franciscana, el prelado resaltó que “el pan de San Antonio no es un pan que pedimos a San Antonio, sino que es un pan que damos con el corazón agradecido”.
Esto “porque reconocemos que el Señor nos sigue concediendo gracia a lo largo de nuestra vida, por intercesión de este Santo que se dedicó intensamente a los pobres, los cuidó, los defendió y evangelizó”.
En ese sentido, continuó el fraile franciscano, “con el corazón lleno de gratitud a Dios que obra a través de sus santos, habiendo reconocido los beneficios recibidos, ponemos este pan en manos de Antonio, para que se convierta en alimento y apoyo de vida para los más pobres”.