Al concluir la audiencia general de este miércoles 5 de junio, el Papa Francisco saludó en la Plaza de San Pedro a una monja de 81 años que, desde hace 56, sirve a homosexuales y “trans” en Roma.
Según informa Vatican News, se trata de Sor Geneviève Jeanningros, religiosa de las Pequeñas Hermanas de Jesús, quien desde hace algunos años mantiene un intercambio epistolar con el Santo Padre.
La religiosa —que vive en una caravana en el Luna Park de Ostia Lido con otra monja de nombre Anna Amelia, para servir a la comunidad LGBT— comenta que lo que a ella le interesa es “ir allí donde a la Iglesia le resulta más difícil ir”. "En este mundo vemos pasar a todo tipo de personas y el corazón se abre, todos somos personas humanas, no se puede tener un juicio estricto", agrega
En el encuentro con el Papa, la monja está acompañada por Ada, quien celebra su cumpleaños y recibió del Pontífice un rosario de regalo.
La religiosa comparte con Vatican News que, hace un tiempo, la familia de un médico estadounidense homosexual, a quien se le habría negado el funeral católico por su condición, pudo saludar al Papa Francisco quien los bendijo; pero que finalmente “partió en todos los sentidos”.