El Vaticano ha emitido un comunicado en relación a las declaraciones del Papa Francisco durante una audiencia privada con los obispos de Roma el pasado 20 de mayo, en la que habría asegurado que “hay demasiada mariconería en ciertos seminarios”.
En un breve mensaje difundido en la tarde de este 28 de mayo, el director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, Matteo Bruni, ha afirmado que el Papa Francisco “está al corriente de los artículos publicados recientemente sobre una conversación, a puerta cerrada, con los obispos de la CEI [Conferencia Episcopal Italiana]”.
Bruni señala asimismo que el Papa Francisco “nunca ha pretendido ofender ni expresarse en términos homófobos, y hace extensivas sus disculpas a quienes se hayan sentido ofendidos por el uso de un término, referido por otros”, dando a entender que quizá habría sido empleado previamente por alguien presente en la audiencia y repetido más tarde por el Pontífice.
Además, desde la Santa Sede reiteran la frase citada por el Santo Padre en más de una ocasión: “En la Iglesia hay sitio para todos, ¡para todos! Nadie es inútil, nadie es superfluo, hay sitio para todos. Tal como somos, todos”.
La polémica expresión del Papa Francisco se enmarca en la inauguración de la 79ª Asamblea General de la CEI, en la que reflexionó junto a los obispos del país europeo sobre diversos temas, como la disminución de las vocaciones al sacerdocio y la vida consagrada, la situación de la juventud italiana y la migración.
Durante la audiencia, el Papa Francisco pidió a los obispos italianos que no ordenen sacerdotes ni admitan en el seminario a personas homosexuales.