En el marco del escándalo suscitado por un grupo de clarisas que han desconocido la autoridad del Papa para así unirse a un “obispo” excomulgado, compartimos lo que hizo Santa Clara de Asís, fundadora de las clarisas, para demostrar su obediencia al Santo Padre y a las disposiciones de la Iglesia Católica, hasta la muerte.
Un milagro por obedecer al Papa
De acuerdo al Directorio Franciscano de Santos, en una ocasión el Papa fue a visitar a Santa Clara. Ella se arrodilló y le pidió que bendijera el pan que estaba en la mesa. El Papa le dijo: “Hermana Clara fidelísima, quiero que seas tú quien bendiga este pan y que hagas sobre él esa señal de la cruz de Cristo, a quien tú te has entregado enteramente”.
La humilde santa le pidió que la perdonara, dando a entender que no era digna de hacerlo teniendo delante al Vicario de Cristo. Entonces, el Santo Padre le insistió, bajo el voto de obediencia.
La santa obedeció y en los panes apareció milagrosamente una marca de cruz. El Pontífice se fue contento, dando su bendición a la santa.
Obediencia a las reglas de la Iglesia