El Papa Francisco bendijo hoy una campana conocida como “La voz de los no nacidos”, que fue donada por la Fundación “Sí a la Vida” y que en esta ocasión será trasladada a Kazajstán.
Antes de que diera comienzo la Audiencia General de este 15 de mayo, el Santo Padre bendijo y también hizo repicar esta imponente campana dorada de una tonelada de peso.
Desde hace cinco años, se envía a un lugar distinto del mundo para concienciar sobre la crueldad del aborto, portando el mensaje de que toda vida es sagrada y e inviolable.
Más tarde, ante los fieles que le escuchaban desde la Plaza de San Pedro del Vaticano, el Pontífice remarcó que el símbolo de esta campana recuerda “la necesidad de proteger la vida desde la concepción hasta la muerte natural”.
La primera campana se fabricó en 2020 en Polonia y lleva grabado el quinto mandamiento “No matarás”.
Las otras cuatro se encuentran en Polonia (donde también tiene su sede la Fundación), Ucrania, Ecuador y Zambia y cada vez son más los países interesados en esta iniciativa promovida desde la Fundación “Sí a la Vida”.