El miércoles 8 de mayo, el Obispo Auxiliar de San Ignacio de Velasco (Bolivia), Mons. Fernando Bascopé, convocó a una conferencia de prensa para repudiar “el acto no jurídico” dirigido contra la diócesis, específicamente las acusaciones dirigidas hacia su Obispo emérito, Mons. Carlos Stetter, cuyo domicilio fue recientemente allanado por la policía.
Este procedimiento, llevado a cabo el 18 de abril por la Fiscalía y efectivos del Departamento Especializado en Lucha Contra la Corrupción (Delcc), se enmarca en una investigación por el supuesto delito de legitimación de ganancias ilícitas en el que habría incurrido Mons. Stetter.
Durante el allanamiento, los efectivos secuestraron una camioneta, dinero en efectivo y documentos personales que serán analizados en el marco de la investigación sobre el origen de su patrimonio, ya que según las autoridades, se supone que el prelado posee propiedades inmuebles y un flujo financiero que supera el millón de dólares, afirma el periódico El Deber.
Este miércoles, acompañado por los sacerdotes diocesanos, Mons. Bascopé expresó su gratitud por el apoyo y la solidaridad recibidos por parte de la comunidad, destacando especialmente la labor pastoral de Mons. Stetter durante más de 40 años en San Ignacio de Velasco.
El Prelado solicitó “que se actúe según la justicia y según la norma”, al tiempo que declaró a la diócesis “en emergencia y vigilancia” , con el fin de “defender la acción de la Iglesia que tiene la tarea de evangelizar”.
Asimismo, pidió a los fieles que acompañen con su oración para continuar la labor de evangelización y de promoción integral.