El Arzobispo de Panamá, Mons. José Domingo Ulloa, pidió a las autoridades recientemente electas “que no defrauden al pueblo panameño”, mediante un comunicado emitido el domingo 5 de mayo, cuando había sido escrutado cerca del 50% de los votos totales de la elección que terminó adjudicando a José Raúl Mulino como nuevo presidente del país.
Mons. Ulloa también felicitó a todos los panameños por su participación masiva en las elecciones generales, lo que catalogó como una demostración “de su amor por Panamá”. Con 34% de los votos, Mulino —representante del partido Realizando Metas— venció a Ricardo Lombana y al expresidente Martín Torrijos.
Mulino se convirtió en el candidato de su partido, después de que la justicia panameña condenara al expresidente Ricardo Martinelli, quien iba a postular para ese puesto, a 10 años de prisión por blanqueo de capitales. El nuevo presidente recibió el apoyo de Martinelli, quien recibió asilo político en la embajada de Nicaragua en Ciudad de Panamá, para evitar cumplir su condena.
Asimismo, Mulino sirvió como ministro de Justicia y Seguridad Pública —entre 2010 y 2014— durante el gobierno de Martinelli y como ministro de Relaciones Exteriores del gobierno de Guillermo Endara, a principios de la década de 1990.
“Es oportuno volver a reafirmar que la democracia y el ejercicio ciudadano no terminan aquí. A partir de mañana, todos tendremos que ponernos la misma camiseta, la camiseta de Panamá y quienes sean elegidos han de seguir escuchando la realidad de nuestro pueblo, para que podamos vivir equitativamente”, manifestó Mons. Ulloa.
El Arzobispo de Panamá agradeció además a los casi 4.000 observadores electorales de la Comisión de Justicia y Paz, que velaron por el buen transcurrir del proceso. Por último, resaltó el papel que los medios de comunicación desempeñaron en la jornada electoral.