Asimismo, saludó en especial al Comandante Christoph Graf, así como a su capellán, al que se refirió como “un excelente benedictino”.
Tras los agradecimientos, el Pontífice destacó que entre ellos hay “un ambiente positivo y respetuoso en el cuartel, un comportamiento cortés con vuestros superiores e invitados, a pesar de los períodos a veces largos de servicio intenso y agotador”.
“Demostráis un alto nivel de motivación y voluntad de servicio, y también -esto me complace enormemente- buenas relaciones entre vosotros: hacéis excursiones juntos, pasáis las vacaciones juntos, salís juntos a menudo. Y eso está muy bien”, remarcó.
En este sentido, señaló que “la relación es la experiencia clave para nosotros los cristianos: Jesús nos reveló y testimonió que Dios es amor, es en sí mismo relación, y en este misterio encontramos la meta y la plenitud de nuestra existencia”.