A raíz de una reciente declaración del Vaticano sobre la dignidad humana, los obispos católicos de Inglaterra y Gales publicaron el miércoles una reflexión pastoral en la que condenan la transexualidad médica y social, al tiempo que animaron a dar una respuesta "sensible".
Recientemente, el Dicasterio para la Doctrina de la Fe se pronunció enérgicamente contra la ideología de género, afirmando que "debe rechazarse todo intento de ocultar la referencia a la evidente diferencia sexual entre hombres y mujeres".
Los obispos católicos de Inglaterra y Gales siguieron el ejemplo del Vaticano en su declaración del 24 de abril: Intricately Woven by the Lord (Íntimamente entrelazados por el Señor), que animaba a enraizar la atención pastoral en la "aceptación... del cuerpo tal como ha sido creado".
“No podemos alentar ni apoyar intervenciones médicas reconstructivas o farmacológicas que dañen el cuerpo”, escriben. “Tampoco podemos legitimar o sostener un modo de vida que no sea respetuoso con la verdad y la vocación de cada hombre y cada mujer, llamados a vivir según el plan divino”, añaden.
“Más bien —continúan los obispos—, cuando una familia o una persona que experimenta estos retos busca ser acompañada en su camino cristiano, nuestro objetivo es ayudarles a redescubrir y apreciar su humanidad tal como fue concebida y creada por Dios, en cuerpo y alma”.
En la declaración, los prelados se dirigen específicamente a “los miembros adultos de nuestras comunidades católicas que han optado por la transición social y médica”.