Este martes, el Papa Francisco, bautizado como Jorge Mario Bergoglio, celebra su santo. En el Vaticano es un día de fiesta y aunque este año no se han conocido los detalles de cómo lo ha vivido, suele festejarlo con pequeños gestos de misericordia hacia los más necesitados.
Cada 23 de abril la Iglesia recuerda a San Jorge, a quien curiosamente se le atribuye la protección del Papado y al que también se le conoce por ser intercesor en la lucha contra el mal.
Es bien sabido que al Papa Francisco le gusta rodearse de gente humilde y sencilla, y que aprovecha cada ocasión para celebrar las fechas señaladas junto a los más pobres, como ocurre en el día de su cumpleaños, en el que suele invitar a cientos de ellos a comer con él en el Vaticano.
Aunque al ser elegido sucesor de Pedro escogió el nombre de Francisco por el santo de Asís, el Pontífice ha seguido celebrando su santo de diferentes maneras.
El primer 23 de abril como Obispo de Roma celebró una Misa en el Palacio Apostólico del Vaticano junto a varios cardenales.
Sin embargo, cinco años más tarde, en 2018, el Santo Padre sorprendió al mundo con su original gesto de repartir helados a los pobres de Roma para celebrar el día de San Jorge.