En un nuevo aniversario del Genocidio Armenio, la Catedral San Gregorio de Narek, en la Ciudad de Buenos Aires, fue colmada por fieles que se unieron a la celebración de la Eucaristía, presidida por el Obispo Eparca en Buenos Aires y Exarca Apostólico para los armenios católicos de América Latina y México, Mons. Pablo Hakimian.
Concelebró la Misa el P. Gomidás y animó la celebración el Coro Sharagán, dirigido por el profesor Andy Istephanian.
En su homilía, el obispo recordó a los mártires que murieron en manos del estado turco, y aseguró que cada armenio perdió a algún integrante de su familia en manos de los genocidas.
El eparca aseguró que, a pesar de los intentos genocidas, los armenios sobrevivirán y existirán para siempre como una nación que abrazó el cristianismo desde el año 301.
Al finalizar la celebración, los miembros de la Agrupación Scout San Vartán, que durante la Misa escoltaron las banderas argentina, armenia y papal, encabezaron la procesión que se dirigió al Monumento a los Mártires ubicado en el atrio de la Catedral San Gregorio de Narek, para colocar allí la ofrenda floral.
Allí se interpretó el Himno Nacional, a cargo de la Banda de la Armada Nacional, y el cantante Miguel Markarian entonó luego las estrofas de Mer Hairenik, el Himno de la República de Armenia.