El Grupo de Trabajo Venezuela (GTV) de Caritas Internationalis decidió extender su funcionamiento “ante una crisis humanitaria prolongada que continúa afectando a millones de personas, generando flujos de migración forzada dentro y fuera del país”, según informó la organización humanitaria de la Iglesia Católica.
Además, llamó a la comunidad internacional a reinventarse para garantizar los derechos de los venezolanos y contribuir a superar la crisis.
El GTV fue conformado en 2018, por delegaciones de Cáritas de Europa, Estados Unidos y América Latina, con el objetivo de atender la crisis económica, política y social que sufren los venezolanos —especialmente los más vulnerables— desde hace ya varios años.
La decisión fue tomada en medio de su sexto encuentro anual, realizado en Caracas del 8 al 12 de abril, en la sede de la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV). Alistar Dutton, secretario general de Cáritas Internationalis, estuvo presente; al igual que Mons. José Luis Azuaje, presidente de Cáritas Venezuela y Arzobispo de Maracaibo.
Ante la crisis venezolana, que persiste en el tiempo, los representantes de las delegaciones de Cáritas acordaron extender el período de funcionamiento de GTV, al constatar algunas situaciones que requieren del apoyo y la supervisión del grupo.
Lo que más resalta del informe del GTV es “la privación alimentaria y la desnutrición crónica en Venezuela en los hogares más excluidos”. Además, indicaron que “la constante inflación, la reducción del valor de la unidad monetaria y el poder adquisitivo alimentario y, las dificultades y brechas en el acceso a los subsidios alimentarios del Estado, hacen muy difícil la realización del Derecho a la Alimentación en Venezuela”.