Este domingo la Iglesia Católica celebra el Día de las Vocaciones Nativas para sostener y formar a quienes se sienten llamados al sacerdocio y la vida consagrada en tierras de misión, de tal forma que ninguna se vea frustrada por falta de recursos.
De esta tarea se encarga la Obra Pontificia de San Pedro Apóstol (OSPA), una de las cuatro Obras Misionales Pontificias (OMP) que de diferentes maneras logra recursos para mantener 725 seminarios en todo el mundo.
En Asia, estos seminarios (152 menores, 13 propedéuticos y 62 mayores) albergan más de 15.000 candidatos al sacerdocio. En África más de 67.000 seminaristas forman parte de los 225 seminarios menores, 116 propedéuticos y 142 mayores. En Asia se forman gracias a las OMP 112 futuros presbíteros en 5 seminarios mayores, mientras que en las tierras de misión de América se forma a 157 seminaristas distribuidos en 1 seminario menor, 2 propedéuticos y 7 seminarios mayores, según datos ofrecidos por OMP.
Para su mantenimiento, en el año 2023 la Obra Pontificia de San Pedro Apóstol destinó más de 16 millones de euros que repercutieron en la formación de más de 83.000 seminaristas, y 2.000 formadores.
Las ayudas se destinan a cubrir un subsidio anual para los gastos de manutención y matriculación, que supone la mayor partida (el 78% del total). El resto se utiliza para la construcción y mantenimiento de los edificios, con vías a su autofinanciación, el apoyo a los formadores, las becas de estudio y a apoyar el primer año de formación de los noviciados de congregaciones religiosas nacidas en territorios de misión.