El abogado del Arzobispo de Salta (Argentina), Mons. Mario Antonio Cargnello, quien recientemente fue hallado culpable de ejercer “violencia de género” contra religiosas carmelitas de esa ciudad, aseguró que apeló a la resolución de la jueza y criticó el proceso de la justicia civil por estar “viciado”.
Se trata de un conflicto de larga data entre el Arzobispado y las religiosas que tiene como tema subyacente el fenómeno de las supuestas apariciones de la Virgen en Salta, que las carmelitas han apoyado desde sus inicios pero la Iglesia aún no reconoce.
En ese marco, la jueza Cáceres Moreno consideró que las mujeres “han padecido hechos de violencia de género en el ámbito institucional del tipo religiosa, física, psicológica y económica por un lapso de más de 20 años”.
Luego de atravesar varias instancias, incluida la intervención de la Santa Sede, el conflicto parece haber escalado durante algunos encuentros entre el Arzobispo Cargnello y las hermanas, lo que motivó la denuncia a la Justicia Civil.
El abogado Eduardo Romani, defensor de Mons. Cargnello en la causa iniciada por las religiosas carmelitas del Convento San Bernardo de la ciudad, consideró que la resolución de la jueza, que obliga al prelado, a un obispo emérito y dos sacerdotes a realizar un tratamiento psicológico y capacitaciones en temas de violencia de género, carece de fundamentos jurídicos.
“Estamos ante un proceso totalmente viciado donde se incumplieron las normas básicas establecidas para las cuestiones de género. Entendemos que la resolución excede las facultades otorgadas a la sra. jueza Cáceres Moreno, por lo que claramente incumplió con sus deberes”, dijo el Dr. Romani a Nuevo Diario de Salta, y aseguró que no cumple con la ley 7888, que regula la Protección contra la Violencia de Género.