En la mañana de este jueves 4 de abril, el Papa Francisco recibió en el Vaticano a los miembros del Colegio Pío Brasileño, Pío Latinoamericano y Mexicano, a quienes dio tres consejos para vivir en plenitud el servicio que el Señor les pide.
Al inicio de su discurso dirigido a los sacerdotes de estos colegios, el Santo Padre reflexionó acerca del Amor.
Recordó que “el primer amor”, es decir, la vocación al sacerdocio, es el “responsable” de haberlos convocado y aseguró que mantener vivo ese amor “es nuestra principal obligación”.
El Pontífice remarcó que “cualquier vocación nace de un amor de predilección”, al tiempo que afirmó que Dios les ha encargado “una tarea peculiar, que nos acerca más a Él: entregarnos por los demás”.
Refiriéndose a los fieles del Pueblo de Dios, el Papa Francisco señaló que “ellos son nuestra razón de ser, el objeto de nuestro amor, pues en ellos realizamos este servicio que el Señor nos pide”, señaló a continuación.
En este sentido, remarcó que “cada hombre, cada mujer, cada niño se presenta a mis ojos como miembro de ese Cuerpo místico cuya cabeza es Cristo”.