Los obispos de México expresaron su preocupación por la posibilidad de que “el crimen organizado y otros grupos delincuenciales intervengan” en las elecciones de este año en México, en las que se elegirán, entre otras autoridades, al próximo presidente del país.
Ese, señalaron, es “el peor de los escenarios, el que mayormente debemos evitar”.
En un mensaje difundido el 2 de marzo, la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), instó a las autoridades responsables de la seguridad ciudadana y las fuerzas del orden, a que “garanticen la protección y el ambiente de paz” para el periodo electoral.
Los prelados subrayaron “la importancia y trascendencia de la próxima jornada electoral”, en la que además de elegir al sucesor de Andrés Manuel López Obrador, los mexicanos votarán también por nuevos diputados y senadores federales, gobernadores de nueve estados, miembros de congresos locales y presidentes municipales.
De acuerdo al Instituto Nacional Electoral (INE), este proceso electoral es “el más grande que ha tenido México”.
En ese contexto, los obispos mexicanos advirtieron sobre los “riesgos que amenazan la estabilidad democrática mediante la violencia criminal”.