El Obispo Castrense de Colombia, Mons. Víctor Manuel Ochoa Cadavid, dirigió palabras de consuelo a la Policía Nacional y a las familias de los cuatro efectivos que fallecieron ayer jueves, a raíz de la caída de un helicóptero en el departamento de Antioquia.
El helicóptero Black Hawk de la Dirección de Antinarcóticos partió de Medellín hacia Tuluá para ser revisado por mantenimiento, sin embargo, alrededor del mediodía se perdió la comunicación, aproximadamente a los diez minutos de haber despegado.
En un mensaje desde de la cuenta de Facebook del Obispado Castrense, Mons. Ochoa Cadavid lamentó las muertes del mayor Juan Carlos Morales Sáenz, capitán César Andrés Rodríguez Ospina, y los subintendentes Feder Alejandro Celis Núñez y Rafael Antonio González Roncancio.
“Es un día de particular dolor para la querida Policía Nacional de Colombia”, manifestó el prelado, “que pierden a estos hombres que han entregado su vida por el gran lema institucional ‘Dios y Patria’”.
Asimismo, se dirigió a las familias de los fallecidos. “Que el Señor los acompañe, les conceda a ellos, a todos, la resignación y la capacidad de poder aceptar de esta tragedia y de aceptar este profundo dolor”, expresó.