SAN SALVADOR,
Al culminar la Misa dominical celebrada en la Catedral, el Arzobispo de San Salvador, Mons. Fernando Sáenz Lacalle, hizo un llamado a “pedir y rezar mucho” por las tropas salvadoreñas que se encuentran en Irak realizando una misión de paz.
El Prelado expresó que es necesario “rezar mucho porque no les pase nada, que hagan una buena labor, realicen un buen trabajo y que eso ayude a la consolidación de la incipiente democracia en Irak”.
El Arzobispo recordó que “ya es una decisión tomada” el envío de un tercer contingente de 380 soldados salvadoreños a Irak, quienes conformarán el batallón Cuscatlán III y reemplazarán a otro grupo similar que está establecido en la ciudad de Nayaf, 160 Km. al sur de Bagdad, desde febrero pasado.
“Hay que saber compaginar el riesgo que supone enviar soldados a una nación en que hay tanta violencia y terrorismo; y, por otra parte, la ayuda que indudablemente se puede realizar”, agregó el Prelado.
El batallón Cuscatlán III deberá viajar a Irak en la primera semana de agosto y tendrá su centro de operaciones en la ciudad de Diwaniya, la cual, según el alto mando del ejército salvadoreño, es un lugar “más seguro” que Nayaf.
360 soldados a Nayaf en agosto de 2003