Este 20 de febrero se cumplen cien años desde que el Hospital Pediátrico Bambino Gesù se convirtió en el “Hospital del Papa”, luego que en 1924 la familia Salviati donase a la Santa Sede el centro de salud que levantó en 1869 con el apoyo de Pío IX.
El origen del hospital se remonta a mediados del siglo XIX, cuando la duquesa Arabella Salviati quiso que los niños de Roma recibieran una mejor atención médica, pues como sucedía en toda la península, los menores eran usualmente internados en los mismos pabellones que los adultos, sin recibir una atención diferenciada.
Así, para lograr su objetivo, tal como relata Vatican News, la duquesa siguió el modelo del Hopital des Enfants Malades de París. Al proyecto se sumaron el esposo, el duque Escipión, y los pequeños hijos que regalaron a su madre una alcancía con sus ahorros.
El primer núcleo del hospital nació el 19 de marzo de 1869, en una pequeña habitación de Via delle Zoccolette, cuando cuatro niñas fueron acogidas y atendidas por dos médicos y las Hermanas Hijas de la Caridad de San Vicente de Paul.
El Papa Pío IX expresó su agrado por este centro dedicado al Niño Jesús y escribió en un documento: “Que Dios bendiga este buen regalo, lo consolide y lo mejore”.