El Papa Francisco llamó por teléfono el sábado 3 de febrero a la Hna. Paësie, una misionera francesa que ha dedicado prácticamente su vida entera a cuidar de los niños de la calle en Puerto Príncipe (Haití).
Según informó Vatican News, el Santo Padre se puso en contacto por sorpresa con la religiosa para expresarle su apoyo e interesarse por la situación de los más de 2.500 niños sin recursos que se encuentran bajo su cargo.
“Cuando sonó mi teléfono, obviamente no esperaba que fuera el Santo Padre”, expresó la Hna. Paësie al medio oficial del Vaticano. Contó además que el Pontífice le transmitió un mensaje de ánimo, le agradeció su cercanía a los niños y también le aseguró sus oraciones.
“Lo que realmente me conmovió de esta llamada fue también la voz del Santo Padre: sentí una gran dulzura y amabilidad”, contó la religiosa.
Cabe recordar que el pasado 19 de enero seis monjas fueron secuestradas y puestas en libertad una semana más tarde. De acuerdo a Associated Press, y según estadísticas de la ONU, en 2023 unas 3.000 personas fueron secuestradas en Haití. En ese grupo hubo varios sacerdotes, religiosas y laicos católicos, que también sufren a causa de la violencia de las bandas criminales.
La Hna. Paësie señaló que “los secuestros en Puerto Príncipe afectan a todos los niveles de la sociedad” y aseguró que muchas madres le han llegado a decir que sin la ayuda de la Iglesia “muchos estaríamos muertos”.