San Juan Bosco, cuya fiesta es cada 31 de enero, se preocupaba mucho por ayudar a que los jóvenes descubrieran su vocación. Por ello, en un libro, el santo dejó una pequeña oración a la Virgen que ayuda a descubrir la propia vocación.
La plegaria mariana se encuentra en el libro El joven instruido, escrito por el fundador de los Salesianos, en el que da recomendaciones a sus muchachos sobre cómo vivir plenamente la fe.
En la sección sobre la Elección de estado el santo indica que “Dios, en sus eternos designios, destina a cada uno un estilo de vida y le da las gracias necesarias a ese estado… Es de suma importancia, hijo mío, que aciertes en esa elección, a fin de que no te impongas obligaciones que no sean del agrado del Señor”.
Es importante recordar que hay diversos tipos de vocaciones dentro de la Iglesia Católica. Entre las más conocidas están la sacerdotal, la religiosa, la de laico consagrado y, por supuesto, la matrimonial.
Para hacer una prudente elección, Don Bosco recomienda en su libro seguir unos pasos. Lo primero es vivir la niñez y juventud con inocencia o “reparar con verdadera penitencia los años de pecado”.
Luego anima a ser perseverantes en la oración, participando de la Santa Misa, recibiendo la Comunión, rezando una novena o triduo, practicando alguna abstinencia y visitando un santuario.