La 51ª Marcha por la Vida, autodenominada la “manifestación anual de derechos humanos más grande del mundo”, se llevará a cabo el 19 de enero en Washington DC (Estados Unidos) bajo el lema With every woman, for every child (Con cada mujer, por cada niño).
Este evento se realiza cada enero para conmemorar el aniversario de Roe vs. Wade, el histórico caso de la Corte Suprema que en 1973 legalizó el aborto en todo el país.
Más de 60 millones de niños no nacidos han sido asesinados desde ese fallo, el cual fue finalmente revocado en junio de 2022 con la decisión de la Corte Suprema sobre el caso de aborto en Mississippi Dobbs vs. Jackson Women’s Health Organization.
“La Constitución no prohíbe a los ciudadanos de cada estado regular o prohibir el aborto. Roe y Casey se arrogaron esa autoridad. Ahora anulamos esas decisiones y devolvemos esa autoridad al pueblo y a sus representantes electos”, señala la opinión mayoritaria en el caso.
El panorama del aborto en Estados Unidos ha cambiado dramáticamente desde entonces y parece estar desplazándose casi día a día. Mientras muchos estados aprobaron leyes para proteger la vida, otros han establecido medidas para poner fatalmente en peligro a los no nacidos.
En el anuncio del tema de la Marcha por la Vida 2024, la presidenta de la organización, Jeanne Mancini, afirmó en noviembre que “sostenemos que elegir la vida fortalece y que el amor salva vidas”.