Las autoridades de la provincia china de Baoding aplicaron severas medidas de “seguridad” para desalentar la participación de los católicos en las celebraciones religiosas por la Navidad, entre ellas, la asistencia de los menores de edad.
“Prohibición de que los niños participen en la celebración de la Nochebuena. Controles del tráfico y clausura de comercios. Prohibición de exhibir objetos relacionados con la Navidad en las residencias universitarias. Estas son algunas de las medidas impuestas por las autoridades locales de Baoding”, informó este 26 de diciembre la agencia Asia News.
De acuerdo a la agencia internacional, en la zona de Baoding, no muy lejos de la capital Beijing, “vive un gran número de católicos”.
Por ello, la Policía local “adoptó medidas excepcionales de seguridad”, como los controles de tráfico cerca de la Catedral de los Santos Pedro y Pablo, y el desvío de los buses “que pasaban por esta zona. Además, ordenaron cerrar todos los negocios ubicados cerca de la iglesia y no se permitieron ventas ni promociones navideñas”.
Una fuente que vive en Baoding indicó a AsiaNews que alrededor de la catedral había policías, vehículos policiales “y agentes con equipo antidisturbios”. Además, se “impidió a los padres con niños ingresar al templo”.
“La policía dijo a los padres que abandonaran la iglesia porque ‘no era seguro para los niños ya que había demasiada gente dentro’”, señaló.