El Papa Francisco revela el lugar donde quiere ser enterrado por una promesa a la Virgen

De hecho, el Papa Francisco visita Santa María la Mayor, una de las cuatro basílicas papales, antes y después de cada viaje apostólico como parte de una tradición y un gesto de profunda devoción.  

“Necesito que recen por mi salud”

Preguntado si “debemos preocuparnos por su salud”, el Santo Padre confesó que “un poquito sí, necesito que recen por mi salud”.

“Y la vejez no viene sola. La vejez no se maquilla, es ella sola, se presenta como es. Y por otro lado, saber aceptar los dones de la vejez. Se debe aceptar que uno puede hacer mucho bien desde otra perspectiva. Es verdad que los viajes ahora están repensados todos”, destacó.

Al mismo tiempo, aseguró que se siente bien y “mejorado” y señaló que “a veces me dicen que soy imprudente porque tengo ganas de hacer y de moverme (...) estoy bastante bien”. 

Destaca la “valentía” de Benedicto XVI

Durante la entrevista, el Papa Francisco también destacó la “valentía de Benedicto” al renunciar al pontificado, aunque aseguró que él nunca ha pensado en hacerlo. “Cuando se dio cuenta que no podía, prefirió decir basta, y a mí me hace bien eso como ejemplo y pido al Señor decir basta, en algún momento, pero cuando Él quiera”.

También resaltó que su relación con el Papa Ratzinger era “muy cercana”: “Yo a veces lo iba a consultar. Y él, con una sabiduría muy grande me decía su parecer pero me decía… ‘usted vea’, lo dejaba en mis manos”.

Subrayó que durante el tiempo que convivieron en el Vaticano, “siempre me ayudó” y fue “muy generoso en eso”. 

“Y tuve la gracia de poder despedirlo porque me enteré por un enfermero que estaba mal y avisé ese miércoles a la audiencia y me fui a verlo”, contó más tarde. 

El Santo Padre precisó que en ese momento Benedicto XVI “estaba lúcido, pero ya no podía hablar y tomaba la mano así, fue linda esa despedida. Fue linda. Y después a los tres días murió”. 

“Un grande, Benedicto era un grande, un hombre humilde, humilde, sencillo y que cuando se dio cuenta tuvo la valentía de decir basta. Yo lo admiro a este hombre”, señaló.

La Virgen de Guadalupe “nos tiene que dar fuerza para seguir adelante”

En el marco de la festividad de la Virgen de Guadalupe, el Papa Francisco aseguró que “el pueblo mexicano se merece una madre”. 

“Cuando hablo de la Virgen, me gusta usar este gesto en sus manos, como la mamá. Las mamás que saben cómo acompañar a sus hijos. Y cuando los hijos son rebeldes, la mamá se calla pero los acompaña con paciencia hasta que lentamente se ubica”, señaló más tarde.

En este sentido, resaltó que “el Señor estuvo grande con nosotros al darnos una madre así, y esa frase tenemos que repetirla en los momentos de tristeza de amor. ‘Yo estoy aquí que soy tu madre. ¿Por qué dudas? ¿No estoy yo aquí, que soy tu madre?’  y eso nos tiene que dar fuerza para seguir adelante”. 

Posibles viajes en 2024 

El Papa Francisco informó que hay un próximo viaje asegurado a Bélgica en 2024 y que hay dos aún por confirmar: “Uno a la Polinesia y otro a Argentina, que están ahí pendientes, veremos cómo se da la cosa, pero con el tiempo voy a ir retomando las cosas”.

Además, el Santo Padre fue preguntado sobre su posible visita a Argentina después de las polémicas declaraciones del nuevo presidente, Javier Milei. 

El Papa Francisco señaló que “en la campaña electoral se dicen cosas en broma, digo entre comillas, se dicen seriamente, pero son cosas provisorias, cosas que se usan para crear un poco de atención, pero que después caen solas”.  

“Hay que distinguir mucho entre lo que dice un político en la campaña electoral y lo que realmente va a hacer después, porque después viene el momento de lo concreto, de las decisiones, de esas cosas”, remarcó.

“Llamo todos los días a la parroquia de Gaza”

Al término de la entrevista lamentó que “ya nos hemos acostumbrado” a la guerra de Ucrania, “y parece que fuera como el café con leche cada día y ahí muere gente, mueren jóvenes”. 

Enfatizó, como en repetidas ocasiones, “que la guerra siempre es una derrota, siempre, los únicos que ganan en la guerra son los fabricantes de armas”.

“Acabo de hablar a Gaza, todos los días llamo a la parroquia. Ahí tienen 600 personas. Los curitas y las monjitas cuidan a toda esa gente y me cuentan lo que está pasando allí. De terror, ¿no? ¿Qué ganamos con la guerra? destrucción, nada más que eso”. Además, aseguró que las madres que pierden a sus hijos en las guerras son “heroínas”.