Más de 100 ciudades se han unido al rezo de Rosario por España en el día de su patrona, convocado para pedir la intercesión de la Inmaculada Concepción ante la situación política, social y moral de esta nación y en respuesta a los intentos de censurar la libertad religiosa.
Grupos más o menos numerosos se han reunido en las calles y las plazas de España, si bien la convocatoria en Madrid ha sido especialmente nutrida, pues a ella han acudido cerca de medio millar de personas.
Además esta oración mariana se ha meditado en numerosos países de Hispanoamérica, como en Estados Unidos, México, Colombia, Guatemala, Nicaragua, Costa Rica, Perú, Chile, Argentina, Uruguay, Venezuela, Bolivia y Paraguay.
Unos minutos antes de comenzar el rezo del Rosario en Madrid, los voluntarios organizadores han dispuesto un improvisado altar ataviado con banderas de España en las que se podía ver el Sagrado Corazón de Jesús y una imagen de la Inmaculada.
Sobre él, una talla de la Virgen María custodiada por dos velones. Tras la imagen, dos mujeres sostenían otra bandera con los Sagrados Corazones de Jesús, María y José. A un costado, un joven elevaba por encima de la multitud congregada un Crucifijo.