BUENOS AIRES,
El Presidente del Consejo Superior de Educación Católica (CONSUDEC), Padre Hugo Salaberry SJ, expresó su preocupación por una resolución del Ministerio de Trabajo que empuja a las escuelas religiosas “al borde de un abismo” al tratarlas como centros privados y obligarlas a elevar los salarios de sus empleados en un porcentaje inalcanzable.
En el editorial del último número del periódico CONSUDEC, el Padre Salaberry recordó que la resolución 175/02 “obligaría a cada instituto de gestión privada a pagar a sus docentes, el proporcional del aumento otorgado a todo el sector privado por un decreto anterior, el número 1273/02 emanado del Poder Ejecutivo Nacional. (Del cual están excluidos los docentes de gestión estatal)”.
“Esta resolución es la condena de muerte para más de dos mil institutos católicos que han prestado y prestan un servicio de entrega y generosidad, fundados la mayoría de las veces porque eran solicitados por la comunidad política y porque las circunstancias y la patria lo necesitaban”, alertó.
“Se reconoce la urgencia de un aumento y también la irracionalidad de la pretensión de intimar a cada instituto para que se haga cargo de ese aumento, toda vez que los institutos nuestros sobreviven por el aporte estatal”, explicó el sacerdote.
En este sentido, agregó que el aporte estatal, “lejos de ser dádiva, es la colaboración que el Estado hace por un servicio que no deja de ser beneficioso para el mismo Estado, dado lo que significa de ahorro al despreocuparse de infraestructura, mantenimiento, personal de maestranza, extraprogramáticos, otros”.
“¡Qué otra cosa quisiéramos que poder solventar los gastos salariales de los docentes con dinero propio para ahorrarle esa inversión al Estado!”, reconoció el sacerdote pero advirtió que esto impediría a muchos padres de familia acceder a una educación según sus convicciones, porque no podrían pagar las cuotas.