Arabia Saudita, bajo la dinastía monárquica de los Al-Faisal y gracias a sus millones de “petro-dólares”, está difundiendo en escuelas islámicas alrededor del mundo una educación anti-cristiana y anti-occidental.
Así lo ha señalado en un reciente informe el “Saudi Institute”, una organización con sede en la capital norteamericana que promueve una versión moderada del Islam.
El Instituto, que ha revisado numerosos textos para niños y adolescentes utilizados en escuelas islámicas de todo el mundo –incluso en Estados Unidos-, y ha encontrado que existe una enseñanza dirigida a tomar una actitud conflictiva contra cristianos, judíos y, en general, occidente.
A los adolescentes, por ejemplo, los textos les piden que no se hagan amigos de cristianos o judíos: “La imitación de los infieles conduce a amarlos, glorificarlos y elevar su estatus a ojos del musulmán, y eso está prohibido”; dice por ejemplo un libro.
Según el Saudi Institute, los nuevos programas piloto y nuevos libros de texto anunciados el año pasado por las autoridades saudíes no han cambiado la situación educativa: “el nuevo curriculum tiene los mismos autores y las mismas ideas que el antiguo”, aunque admiten que ha cambiado el lenguaje.
defendía la esclavitud